Isla Ometepe en moto, Nicaragua
por Aleho Montoya · Publicada · Actualizado
Isla Ometepe – Nicaragua
Nuestra experiencia empezó excelente. Una poderosa moto de 250 cc con la cual me sentía libre andando por las calles de esa hermosa isla y acompañado durante todo mi trayecto por 2 volcanes que constantemente observaban nuestros movimientos. Hay muchos negocios alrededor de la isla para alquilar. Empezamos visitando un lugar llamado Ojo de Agua el cual es un lugar donde hay unas fuentes naturales de agua y artificialmente se construyeron 2 piscinas donde te puedes bañar. Nada del otro mundo pero si eran bastante refrescantes.
Después de casi 2 horas de trayecto y estando ubicados en la parte norte de la isla sentí que algo no estaba bien con el acelerador y de repente algo se reventó y la moto se detuvo. Estábamos en el medio de la nada ya que esta isla cuenta con muy pocos barrios y entre ellos no hay casi nada excepto una que otra casa. No teníamos celular, no sabíamos que había pasado y no tuvimos otra opción más que empujar la moto hasta la casa más cercana la cual nos costó unas cuantas gotas de sudor. Tuvimos bastante suerte ya que llegamos a una casa de una familia encantadora.
Siempre estuvieron dispuestos a ayudarnos y nos prestaron un celular para llamar a los mecánicos. Mientras estos llegaban pudimos aprender mucho de la cultura nicaragüense en esta isla. Nos presentaron ante cada uno de los miembros de esta familia como también pudimos conocer a todos los animales que vivían con ellos, conejos, loros, gallinas, patos, perros etc. Nos invitaron a almorzar, nos dieron frutas de uno de los arboles que tenían. Mejor dicho, no hay mal que por bien no venga y tuvimos que esperar casi 2 horas las cuales no fueron ningún obstáculo ya que estábamos disfrutando de un excelente rato.
Después de este pequeño percance tomamos de nuevo nuestra moto y nos dirigimos hacia un fantástico lugar en esta isla llamado Punta Jesús María. Este es un pequeño tramo de tierra donde las dos corrientes del lago se encuentran. Tener un hermoso volcán detrás, los colores que se crearon en el cielo y a la vez poder divisar las corrientes de este lago fue bastante encantador. Para ese entonces ya era de noche así que decidimos irnos a descansar para al otro día salir temprano a completar la parte sur de la isla que nos había quedado faltando.
La isla está habitada por muchos tipos de animales de todas la especies, entre ellos están los alacranes y arañas. Aquella noche vimos una inmensa araña (no era tarántula), nada grave. Al siguiente día antes de salir de nuevo en la bicicleta vi muy cerca de la maleta a un alacrán que se quería entrar entre la ropa. Tomé una estúpida decisión de intentar matarlo con mi chancla. En el momento que puse mi chancla sobre él, la punta de su cola alcanzó a pinchar mi dedo dejándome un gran dolor por un par de horas. Según el dueño del hostal, el estripar el alacrán y luego poner su liquido sobre mi herida ayudaría a que el dolor disminuya, así que eso hicimos.
Decidimos empezar con nuestro recorrido en el lado sur de la isla el cual también estuvo bastante entretenido. Muchos cerdos, ganado y gallinas en sus calles. Y siempre fue hermoso poder estar presenciando al menos un volcán durante todo el recorrido.